La bella Katerine desde que entra en la habitación se siente la alegría que inunda la habitación; su sonrisa es franca y abierta, tiene un buen trato hacia tiempo que no la veía para gozar, aspirar el aroma de su exquisito cuerpo y saborear su esencia, he tomado el con ella varios servicios y el mas bueno ha sido este, sera porque como sea ya no somos dos extraños, para gozar de la noche con una cenita ligera y un licorcito, una platica siempre es interesante escucharla, ya listos, siempre empieza ella con esos besos suaves y ricos que se van haciendo mas intensos y cachondos, que prenden a cualquiera, recorro su cuerpo, de pies a cabeza, lamiendo los pezones las tetas completas y vientre y ese magnifico trasero, tocando todo al mismo tiempo para que se prenda mas, se ve que le gusta, me detengo un rato donde empieza la línea que va a hacia sus nalgas, separo sus piernas un poco mas, la recorro una y otra vez, le encanta como se lo hago se acomoda para facilitarme el acceso y para recibirme.
Le doy vuelta y empiezo a agarrar su trasero y aprieto sus gluteos, toma mi pene ya endurecido y me pone el plastico con la boca y ayudandose con sus manos, me da una mamada riquisima, sin penetrarla paso mi pene entre su vagina y ano mientras los besos han subido de tono, me jala para que entre en ella le levanto la cadera para ponerle una almohada en las nalgas y se la meto despacito poco a poco,ella me enrreda con sus piernas y se mueve jalandose con ellas, cambiamos y se pone de perrito a la orilla de la cama pone su cara en cima de la almohada y me agarra de los tanates cuando entro en ella se lo hago con firmeza sujetandola del hermoso trasero que tiene, los gemidos no se hacen esperar y me exita mas me aprieta suavemente lostanates y no puedo resistirme a las sensaciones que me causa y me vengo con ella entre expresiones mutuas de gozo.
Después de tirar el condon, el aseo de rigor y haber tirado el miedo, secos y listos empieza el segundo, las lenguas se unen como una sola en unos besos intensos, beso su cuerpo, voy a sus deliciosos pechos y a los erectos pezones, a su abdómen, piernas y me detengo en la tibieza de su sexo, me masturba y pasa sus uñas por mis tanates, me puso el condon y que hacemos un exquisito 69 y se monta de frente a mi mientras dirige mi pene con su mano, cierra los ojos y se deja caer y lo recibe con gusto sube y baja con el viejo mete y saca, para adelante y para atrás, siento su calor en cuanto entro en ella, es una buena jinete, sabe que me gusta que se sirva con la cuchara grande, sigo un buen rato y ahora nos acostamos levanto sus piernas y las pongo sobre mis hombros hasta que explote como palestino en millones de chispas quedamos abrazados sudorosos cansados pero con una satisfacción innegable un buen baño terminamos con el licorcito y salimos de la habitación rumbo al estacionamiento despedida con dos buenos besos y cada quien fue a su auto.