MI ÚLTIMO ENCUENTRO CON SASSHA (Escorts)
Para mà fue una tremenda sorpresa ver que Sassha habÃa regresado y que mostraba nuevas fotos con su evidente embarazo. La semana pasada le envÃe un mensaje para solicitarle una cita, su respuesta fue pronta y acordamos la hora y el lugar.
Llegué, me instalé, le indiqué el número de habitación y me dispuse a esperar. Esperé alrededor de 45 minutos, por un momento pensé que serÃa plantado o que una cita anterior la retrasaba, el tiempo empezaba a presionarme pues debÃa regresar a mi trabajo. Le envÃe un mensaje mas y respondió con una llamada argumentando el tráfico. En fin, poco después llegó.
VestÃa, tal como le pedÃ, el vestido negro con blanco que muestra en sus nuevas fotos. ¡Me encantó verla! La primera emoción fue de ternura al verla tan linda, ahora más por su embarazo. Muy pronto la ternura mutó en pasión y deseo al empezar a besarla y recorrerla con mis manos, al sentirla suave, firme y tibia. La temperatura se elevó cuando levanté un poco su vestido y sentir que la tanga estaba ausente.
Las ropas volaron y mis manos no dejaban de llenarse con su ser ¡que maravillas hace el embarazo en el cuerpo de una mujer! Me nutrà deliciosamente y con avidez de sus senos, de vez en cuando me pedÃa con susurros “¡no me muerdas!”, la verdad es que querÃa comerlos completitos. Luego ella hizo lo propio con mi miembro; el placer era doble, experimentar el roce y la humedad de su boca y ver la toma lateral en el espejo, se lo comÃa completito.
Abordamos la cama y me monto, su rostro reflejaba placer mientras mis manos se aferraban a sus senos. Me arriesgué y le pregunté si recientemente se la habÃan dado rico, me contestó “SÃ, con una amiga y un amigo”, yo la instaba a que me contara y asà lo hizo entre gritos, gemidos y cambios de posición, nunca sabré si su relato fue real o no. La puse de perrito y arremetà con ganas, el sudor inundaba mi frente pero no querÃa parar, al lado estaba el lubricante y puse bastante en mi dedo y poco a poco lo inserté en su colita, la cual estaba muy cerradita. Al entrar mi dedo sentÃa mi miembro dentro de ella. Asà la estuve estimulando unos minutos, luego pasamos al sillón de la habitación. Se acomodó de a perrito, puso una almohada debajo de ella, y abrió las cortinas que nos ocultaban del mundo exterior. Mi miembro estaba durÃsimo y al tercer intento logré penetrar su colita, ella gritaba, quizá con una mezcla de dolor y placer. Me dio una orden que nunca dude en cumplir “¡métemela toda!” Se la di con todas mis fuerzas, después de unos minutos me pidió paz, yo solo bajé el ritmo unos instantes y luego se la volvà a dar con todo. Era extraordinario como mi virilidad se perdÃa en sus entrañas mientras ella gritaba “¡ya! ¡ya! Por favor”. Mi orgasmo fue poderoso, todos mis músculos se contrajeron y mi semilla se derramó generosa. Me quedé dentro de ella un poco mas, disfrutando el epÃlogo de este sexo salvaje.
Me tiré en la cama, casi me sentÃa en otro mundo, ella me veÃa sonriendo y se metió a bañar. La alcancé un poco después.
En el encuentro vivimos otras dos deliciosas relaciones en un tiempo mayor al que tenÃa programado, al final el tiempo es relativo y dejé de preocuparme por regresar al trabajo, a final de cuentas yo soy el jefeÂ…
Un saludo a la banda.
El Peregrino
PD. Creo que debo buscar ayuda profesional, ya son muchos, muchos los encuentros con ella ¡soy adicto a Sassha!





HABIA OTRA CHICA EMBARAZADA EN LA PAGINA PERO YA NO LA VEO, QUE PASO CON ELLA