» TU BOTON
»
» Estamos tan distantes uno del otro,
» pero hasta aquí siento tu olor,
» yo sé que hace frío allá,
» pero ese olor tuyo
» me habla de tu calor.
»
» Entonces imagino el sabor salado
» que nace de tus fantasias
» Y deseo saber de él,
» tus rodillas temblorosas,
» son barreras a mis mejillas;
» no me dejan pasar.
»
» Pero ese olor me desespera,
» con instinto primitivo
» siento sed de esa mezcla de urea y sal.
»
» Mis lamidos hablan por mi
» Le piden a tus muslos
» que me dejen pasar,
» pinto entonces sobre tu valle
» colores de extrema pasión.
»
» Y aunque al principio tu te resistes
» nada detiene aquel cálido embate,
» Tu respiración se acelera,
» ahora tus uñas en mi cabellera,
» son las que hablan por ti.
»
» Tus rodillas se separan
» y me invitan a pasar,
» pero yo prefiero esperar,
» regreso entonces a tus muslos.
»
» Ese olor tuyo me enloquece
» y más aún cuando he visto
» que tu lugar secreto
» ha solloza de emoción
»
» Tus puertas se abren entonces de par en par
» y tus uñas se clavan otro poco mi,
» me dirigen hacia aquel ansioso botón
» que tus labios ahora ya dejan ver.
»
» Me acerco un poco más
» y eso te roba la cordura,
» ya estoy cerca de ese manjar
» ese sabor tuyo está ahora en mí,
» yo no deseo dejarte ir.
»
» Mis dientes sujetan el epicentro
» y entonces tu llegas hasta allí,
» lo que has ansiado una y otra vez,
» una mezcla de espasmo y estertores,
» es tu volcán que erupciona
» y es solo para mi.