La dama la escort y la amante me llevo hasta el universo . (Recomendaciones)
Lyly, como casi siempre, llegó puntual a la cita, de inmediato comenzaron los besos, bien dados y profundos, interminables, mientras, acariciaba sus nalgas, subo su falda y empiezo a tocar su vagina, humeda ya, ella mientras tanto me tocaba y acariciaba el miembro, empece a besar y lamer sus pechos, y me invitó a darnos una ducha, nos dirigimos a la regadera y ahà siguió la acción, más besos y caricias, ella se inclino y empezó a mamarmelo, delicioso, mientras yo le metia los dedos en su rica vagina, y luego me dirigió el dedo a su ano, asà que también le toco dedo, en verdad esta mujer es única, se metÃa mi pene lo más que podÃa, nada que sólo la cabeza, no, todo, nada más de acordarme como desaparecÃa mi amigo en su boca ya quiero volver a llamarla, pasamos a la cama y ahà continuó la acción, me senté en la orilla de la cama y ella se incó a seguir probando mi amigo, me recostó y me levantó las piernas para besar mis testiculos a placer, mordiéndolos ligeramente, bajando hasta llegar a convertir aquello en un beso negro, para después regresar a la punta de mi pene lamiendo todo el camino y volviendo a meter todo en su boca y al sacarlo ver como estaba lleno de saliva y todo este placer se repetÃa una y otra vez. Después de no sé ya cuantos minutos se subió y empezó a cabalgarme, movÃa sus caderas ritmicamente, se levantaba y se recostaba en mi para besarnos apasionadamente, o me deleitaba lamiendo y mordiendo sus pechos, y abriendo sus nalgas, tocando su ano, mientras ella me decÃa que le gustaba que la abriera. Cambiamos a misionero y ahà sà casi pierdo a las primeras de cambio, te envuelve con sus piernas te abraza y aprieta con su vagina de una manera que parece que se va a quedar con él, mientras seguimos con los besos y ella no te deja alejarte, me agarra las nalgas y me jala hacia ella, y mientras moviéndose, y de repente dice que se va a venir que no pares y como puede uno parar, sigo moviéndome y pensando en no sé que para no venirme y terminar ahÃ. Se viene, me araña, gime, grita, y yo ahà tratando de no venirme, ya no me muevo y ella sigue apretando cada vez más a mi amigo y besándome con desesperación, que bruto. Vuelve un poco la calma y le pido que se ponga de perrito en donde el espectaculo de su culo es soberbio, su vagina rica, mojada, lubricada, se la meto y ella gimiéndo pidiendo más, moviéndonos sincronizadamente, yo abrÃa sus nalgas y a ella le gustaba, tocaba su ano y le metà el dedo mientras la seguÃa cojiendo, ella se inclinaba y mostraba su culo a continuación le metà dos dedos en su *, ella se empinaba más, en eso me dijo "Culeame amor", me salà de su puchita y se lo deje ir por su culito, abriendo sus nalgas y viendo como se lo comÃa, ella empinadita toda, y yo moviéndome cada vez más rápido, viendo a ella como jalaba las sábanas y pedÃa más, que la abriera, que le gustaba, que le diera por su culito, que era mio, la verdad increible, nos levantamos y ella se arrodilló en un sillón y a seguir dándole por su *, un placer ver como se comÃa todo, nos pasamos al tocador sin separarnos a seguir dándole, incanzable la mujer. Hasta que fui yo quien se cansó me salà y ella procedió a darme otra buena mamada primero de pie y luego ya recostado en la cama, como sólo ella sabe, hasta hacerme venir en su boca.
La verdad terminé muerto, después de aquello y todavÃa me pregunta que si me cansé. Platicamos un rato y empezó de nuevo la acción con besos apasionados y volviendo a aplicarme un oral para despertar al amigo, como le dice.
En resumen el tiempo junto a esta mujer pasa volando, es garantÃa de placer, es alegre, simpática. Su especialidad, el anal, es de las pocas chicas que no me dicen que no en cuanto lo ven, al contrario creo que se prende más. De limpieza siempre bien. Sin duda seguiré repitiendo.Llevo 7 y me sigo empeñando en seguirla contratando .




