Primero que nada, quiero mencionar que esta es mi primera reseña. A pesar de que soy seguidor de este foro desde hace unos años, apenas hace unos días decidí volverme un usuario de esta comunidad dedicada a los placeres de las damas de compañía. Sin más, espero y disfruten de ésta anécdota.

La siguiente aventura sexual, sucedió un viernes a inicios del presente año. El lugar del encuentro fue en el Hotel Pirámides Narvarte al mediodía, en un habitación estándar. Comienzo el relato

Su nombre es Ahini, su edad 22 años. El encuentro se pacto con unos días de anticipación. Durante nuestras conversación para acordar la cita, le pedí llegar con una minifalda y las medias que tiene en una de sus fotos.

Como es lo usual, llegue a mi habitación con un hora de anticipación. Le envié mensaje a mi compañera habitación y preparé los elementos necesarios para el encuentro: condones, lubricante y otras del montón. Me di un baño para relajarme y estar limpio. Salí y me puse un pans sin bóxer para ir más directo a lo que venía. Y cómo es costumbre en mí, puse porno para ir calentando motores.

Casi a 10 minutos de la hora acordada, suena el teléfono de la habitación y me anuncian que mi visita había llegado. Con algo de nervios y dudas espero cerca de la puerta para escuchar los pasos de mi teen que esta por llegar. En eso, me acuerdo que la tele estaba encendida, y dependiendo de la chica en turno, a veces la dejo con el porno y otras no. En ocasión decidí apagarla, y justo en ese momento escucho que tocan a la puerta. Me apresuró y para mi sorpresa llega una deliciosa ninfa con minifalda y medias. La hago pasar, le ofrezco algo de beber y mientras voy sirviendo un poco de agua en su vaso, ella me saluda con unos besos muy ensalivandos. Mientras nos seguimos besando, mis manos recorreren su cuerpo y se quedan un buen rato disfrutando de sus nalgadas. La volteo y la hago sentarse sobre mi, para comenzar a masturbar a la lolita que tanto deseaba. Después unos minutos y de sentir como se humedecia ese coñito de 22 años, decidí que era mi turno. Nos quitamos la ropa y sin pedir permiso, la pequeña mamadora se fue directo a devorar mi miembro erecto. Ver esa carita mientras me succionaba como demonio, me prendió demasiado, por lo que lo siguiente fue hacer un face fuck intenso y en diversas posiciones a la pequeña Ahini. Su manera de mamar, me recordaba a otra teen que era toda una zorrita, la legendaria Paola. Ambas saben usar cada parte de su boca para satisfacer cómo se debe un a un hombre. Los sonidos, la lengua, la manera en que me comia los huesos, su saliva cubriendo todo mi pene y esa mirada de ninfa, me estaban dejando en las puertas del paraíso. Sintiendo que después de varios minutos, estaba a punto de reventar, le pedí que se incara y me dejará llenarle su carita de semen. Sin chistar, Ahini abrió su boca y saco su lengua para acto seguido ser cubierta por toda mi leche acumulada de días previos, esperando a llegar a ese hermoso y juvenil rostro.

Por el momento, esta la primera parte del relato. En otra ocasión contaré sobre cómo fue los 2 ronda que tuve con ella, en esa misma cita.

Sin más, les deseo muchos brincos con todas las damas de la noche.

Ante.
Mr Oizo