Con la salud no debemos jugar,como dices,no es normal la persona que sabiendo que va caer a la profundidad de la desgracia no tome las precauciones mundialmente difundidas y establecidas.Es cuestiòn de conciencia y amarse a si mismo.El incrèdulo desafiarà estùpidamente,no solamente se enfermarà èl sino tambien infamemente a otras personas.
Como lo manifiestas,estaremos mas seguros usando el CONDÔN, y felices continuaremos gozando de este placer tan excelso hasta que las fuerzas nos acompañen. SALUDOS JAVIERZIN.