Esta historia es del bául de los recuerdos:

Señores, me presento ante toda la comunidad, desde los maestros en el arte del sexoservicio, pasando por los que estan en muy cerca de serlo, hasta los novatos como un servidor. Me gustaría compartir con ustedes algunas historias que tengo acerca de mi corta experiencia en esta apasionante actividad.

Bueno pue ahora que se ha mencionado con insistencia la nueva ubicación de las mujercitas que daban servicio en la calle de Yucatán, les contaré de la primera vez que fui a ese lugar, supe de ellas, gracias a este tres veces Heróico foro. Fue un dia de junio del año pasado, después de que fui a una entrevista de trabajo, pues para celebrar que me habían aceptado en esa chamba y aprovechando que estaba por la glorieta de Insurgentes, me dije: ¿por que no ir a echarme un buen palo a tan distinguido lugar> y pues que me contesto, ¿por que no> y como yo siempre me hago caso, pues que me lanzo. Llegué a Yucatán 11b, que era un edificio más viejo que silvia pinal, pero lo importante era la carne que guardaba dentro. Yo iba con la intención de conocer a Vanessa que según había leido aqui mismo, era muy buena para el cojín, y fue ella precisamente quien me presentó al material disponible, inculida obviamente ella, pues ¿por quien creen que me decidí>, así es por la del cabello rizado (el de arriba), osea Vanessa, pasamos al cuarto y bueno ya sabran el ritual previo, (osea aflojar el varo, $150 por una revolcada) fue a pagar el servicio y regreso muy sonriente (caba aclarar que en estos lugares no esperemos encontrar una bellezas, en esta caso Vanessa aspiraría como máximo a un 7.5 en cuanto a físico, ¿por algo cobran $150, no>) bueno para no extenderme más de lo que ya lo hice, les diré que me sorprendieron algunas cosas de ella, que no es muy común (por lo menos para mi) en este tipo de servicios:
1.- Su actitud era muy buena, (amable, platicadora y con una sonrisa de "que esperas para cogerme" que no podía con ella)
2.- Me dijo que me acostará y me pasó sus tetas por el pito que por supuesto de inmediato le respondió.
3.- Después me puso las tetas en la boca para que se las chupara
4.- Me dejó dedearla sin ningún problema.

Después de eso pasamos a la acción en tres posiciones (perrito, misionero y su cabalgada), no me pidió propina pero yo decidí darle $50 por que me había parecido buen servicio.

Volví después a tomar 2 servicio más con ella, hasta que un día fui y me la pelé por que ya estaba clausurado.

Esta historia la comparto con ustedes, por el simple gusto de contarla, espero no haberlos aburrido, también espero no causar polémicas, yo solo cuento historias de sexoservicio, para incluirlas en el anecdotario.

P.D. Espero pronto ir visitarlas a su nueva dirección y traerles el reporte, por cierto si alguien sabe si Vanessa esta en este lugar, le agradecería que me informe, para revivir viejos tiempos y si no está, pues habrá que ver las opciones que hay en el menú.

Gracias por leerme, buenas noches y ¡BUENA SUERTE!