Hola a todos los compañeros del foro...

Si bien casi no dejo reseñas debido a que siempre me estan marcando el paso en mi trabajo actual y me conecto ya muy tarde cuando puedo, quiero compartirle mi experiencia con una leyenda de este foro: Bibi.

Ahi va y espero que la disfruten...

Atte. Frank Castle

Lugar: Hotel Harare
Habitación: 103
Fecha: 21/05/2009, 15:00

Al revisar el perfil de esta hermosa dama y con todos los comentarios hechos por los compañeros foristas y aprovechando que estaba de vacaciones en estos lugares, tratando de disipar mis dudas acerca de esta leyenda de esta gran ciudad, que me descuelgo de inmediato al lugar anteriormente mencionado, con la idea de conocer a Bibi. En un primer intento, no logro contactarla y dentro del plan B, llamó a otra chica, la cual me comenta que no puede desplazarse en el tiempo acordado (rayos !). Echando toda la carne al asador, vuelvo a marcarle a Bibi y con la suerte de que entra la llamada a la primera; con su tono de voz tan dulce, me comenta que en 15 min. está conmigo.

Con una precisión de reloj suizo, toca a la puerta de la habitación y veo que viene atraviada con una blusa negra muy ceñida a su estilizada figura y con unos jeans de mezclilla, que al despojarse de ellos mostraba su silueta bien formada con bastante trabajo en el gym. Me hace recostar en la cama ya desnudo y empieza a recorrer mi cuerpo con unos besos que encendieron la llama interior y a mi amigo, quien estaba esperando el momento justo para entrar en acción. Al darse cuenta de ello, Bibi me hace dar la vuelta y empieza un oral que casi me hacer soltar toda la carga. Le sugiero hacer un 69, para que también lo disfrute, a lo que ella accede y con toda la calentura que ya tenía encima, trato de hacer un oral muy delicado en su intimidad, la cual tenia un aroma tan suave y dulce con el aroma de las flores al inicio de la primavera. Despues de un rato en dicha posición, procedo a entrar en su intimidad con la mayor suavidad posible; sin emabrgo, ella hace unos giros con su cadera que me hacen perder el control y procedo a recostarla, acelerando como un piston a alta velocidad. Al ver su disfrute y sus gemidos, no puedo aguantar más y me dejó ir en un torbellino donde suelto mi carga seminal y a sentir contracciones en mi interior, en la parte baja de la espalda, como un escalofrio que recorre toda mi columna vertebral tan placentero que no existe la palbara adecuada para describirlo.

Después de este round, pasamos a dar un regaderazo y como muestra de agradecimiento, le ofrezco darle un masaje, a lo cual ella accede y al darle el masaje y con la platica durante el mismo, pude darme cuenta que ella tiene la mezcla exacta de sensualidad, experiencia y calidad en su servicio que le ha hecho forjar su lugar como una leyenda en estas lides.

Bibi, un beso y un abrazo donde quiera que estés; espero que te guste el obsequio que te di y tambien espero volverte a verte pronto y mucha suerte en la aventura que vas a emprender (lo que me comentaste al final)...