Hace no mucho tiempo, mi amigo Tivoli que es una persona amable preocupada por lo que sienta su pareja, me preguntaba como era que más me gustaba que me hicieran sexo oral.

Su pregunta directa me dejó pensando, con un suspiro largo y sin saber que contestar concretamente lo que hice fue permanecer en silencio unos instantes… lo primero que me vino a la mente fue la frase
de Woody Allen que dice:
<<Es curioso que se le denomine sexo oral a la práctica sexual en la que menos se puede hablar>>

De ahí, buscando desglosarlo para empezar me di cuenta que ciertamente no es sencillo definir con pocas palabras el como y por donde con exactitud, cada persona es absolutamente diferente y sin darle muchas vueltas creo que cada quien lo practica a su modo y le va buscando según las respuestas que le da cada pareja, son señales que te indican si vas por buen camino o no, pues hay a quienes les agrada el trato rudo y otros que prefieren lo más delicado.

Todos sabemos que la definición teórica de libro dice, que es una práctica sexual en la que se estimulan los órganos genitales con los labios y la lengua. Cunnilingus (para las estimular los femeninos) y Felación (para estimular masculinos).

En la práctica, se percibe que no es tan simple como comerse una paleta tutsi de forma sensual, pienso que en la realidad las cosas van más allá y no basta solo con dejarse llevar y disfrutarlo… un verdadero “buen amante” es aquel que entre sus múltiples virtudes posee algo de técnica en este desempeño. Si no me creen podrían practicar lo que dicen los expertos: Hagan un recuento de sus experiencias personales en donde han sido más exitosos. El pronóstico en una de sus constantes será que le proporcionaron un buen sexo oral a sus parejas.

Por eso creo que: “El sexo oral es como las Matemáticas”, todos en algún momento llevaron esa materia como parte del paquete de aprendizaje al abrirse a tener una vida sexualmente activa, todos tuvieron una carga de curiosidad… casi a todos les tocó tener que vivir la experiencia de al menos intentarlo una vez, de tener probables dudosos o triunfantes resultados y de ahí se desprendió parte del “como y que tanto”, en el dominio de esta área en el “aquí y ahora” de sus preferencias de vida.

Esta es la razón por la que no a todos les gusta, no a todos les interesa, no todos tienen habilidad, no a todos se les facilita… ¡igualito que las Matemáticas!

Interesante saberlo… ¿no les parece>

Un beso grande, Afrodita